Es el tercer modelo que hago con aerógrafo y también el tercero de mi reenganche a esto del plástico. No recuerdo que en mi anterior etapa hiciese nada de Italeri, pero desde luego tengo muy claro que a no ser que alguno de vosotros me recomiende algún modelo en concreto porque tengáis constancia contrastada de su calidad, desde luego va a pasar mucho, mucho tiempo antes de que compre cualquier otro de esta marca. Nada más abrir la caja la decepción fue mayúscula: muy pocas piezas y de una calidad bastante pobre. Y no me refiero sólo al detallado de las piezas, sino también a la calidad del propio plástico, que me pareció bastante malo. En cuanto a las calcas, para qué hablar…. una triste hojita con las mínimas posibles. Incluso los stencils vienen justitos, justitos….

Mi miedo se disipó bastante cuando comprobé que el fuselaje encajaba bastante bien en sus dos mitades, al igual que las alas. Lo malo vino después….rebabas, misiles de una sola pieza…. y no hay nada como perder alguna pieza para que el cabreo vaya en aumento (en mi caso el mando del copiloto, que tuve que rehacer con un trocito de plástico de las grapas).

En lo que se refiere al scratch, me he limitado a mejorar un poco los asientos, añadiendo conductos en sus laterales, cinchas hechas con cinta de carrocero y las anillas de eyección con hilos amarillo y negro. Esto era la primera vez que lo hacía y no me acabó de convencer, pero no por la técnica que me parece sencilla y muy práctica, sino porque empleé unos hilos con demasiado algodón y me dieron problemas porque al secar quedaban pelillos. (De todo se aprende, que puñeta!). También he practicado el agujero que puede verse en el lateral, bajo la cabina, y luego con tiritas de plástico he intentado simular la rejilla que el avión lleva en la realidad. La que aparece un poco más atrás (muy ennegrecida) también debería haberla hecho a scratch, pero lo cierto es que a esta escala me pareció demasiado atrevimiento para mis capacidades, y tuve miedo de estropear la maqueta, así que me limité a pintarla muy oscuro para que parezca algo más real. También he cortado los alerones, el timón de cola y los pequeños aleroncitos que lleva a la entrada de las tomas de aire de los motores. Todo ello venía unido a las piezas y también es la primera vez que lo pruebo. Resultado: mejor de lo que esperaba para ser la primera vez, y deseando probarlo de nuevo para mejorar.

Después del lijado, relijado y requetelijado, lo prepanelé con negro mate de tamiya tirado con aerógrafo. Después empecé a aplicar el color base panel por panel para no eliminar el prepanelado. Otra cosita nueva…. y también satisfecho con el resultado (aunque obviamente a años luz de maestros en el tema como Moelders). Por último, el enguarring, utilizando negro mate de Tamiya diluido con blanco mate también de Tamiya, y después de haber barnizado todo con Future. Hablando de ello, también es la primera vez que utilizo el Future para una carlinga un poco «limpia» ( me explico: me refiero a una de tipo burbuja, que no tenga montantes entre medias) y la verdad es que el resultado se aprecia mejor todavía que en el Messer que hice antes. Queda muy limpito y transparente. Parece cristal de verdad. Panelé con acuarela negra diluida y luego barnicé con Marabú mate tirado con aerógrafo.

Total, que el resultado lo podéis ver en las fotos que os pongo, y que representan (o al menos eso he intentado) el póster que tengo colgado en casa, y que es el momento del despegue del primer vuelo «oficial» el 31 de agosto de 1996 en la factoría de Getafe, acompañado por dos F-18 y pilotado por Alfonso de Miguel. (Digo oficial porque realmente no era el primer vuelo. Tan solo era el oficial para la prensa y mandos militares, pero ya llevaba unas horillas de vuelo a cuestas).

Ah, y para terminar, me vais a perdonar, pero en esta ocasión además de agradeceros vuestros consejos y vuestra ayuda para localizar fotos detalladas, conseguir las pinturas exactas y un montón de cosas más, me vais a permitir que dedique este pequeñajo a YOGUI, mi padre, que como ya he comentado en otra ocasión, se ha jubilado el pasado Enero, después de trabajar durante más de 40 años en C.A.S.A (ahora EADS-CASA), los últimos de ellos precisamente en el proyecto Eurofighter, desde que comenzó.

Va por ti Gordi! (aunque no leas esto).